“Entonces Jesús parándose, mandó llamarle: y llaman al ciego, diciéndole: Ten confianza: levántate, te llama.”
Marcos 10:49
Este versículo forma parte de un relato que es muy rico en su contenido en cuanto a cómo obra Jesús haciendo milagros y ayudando a los necesitados que lo buscan. En Marcos 10:46-52 se puede ver esta historia. Te invito a que la leas. Hoy, Bartimeo que estaba ciego y luego vio por el poder de Jesús, puede ser cualquiera que está necesitado de un milagro y una ayuda oportuna. Bartimeo estaba al costado del camino necesitado, mendigando y esperando una oportunidad, hasta que se enteró que Jesús pasaba.
Hoy muchos sin darse cuenta están al costado del camino y ciegos por estar enfocándose en mendigar atención, una mejora, una ayuda económica, una oportunidad única, que pronto termine la cuarentena y no dándose cuenta que Jesús está cerca y a la mano.
Si Bartimeo llamó a Jesús desde lo profundo de su ser, hoy tú puedes hacer lo mismo. Llámale, clama a Él, a su atención y podrás ver con los ojos de la fe como Dios te llama en Espíritu mostrando su mano que dice ‘ven a mi así como estas y se bendecido´. Jeremías 33:3 dice: “Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces”.
Bartimeo dejó todo y acudió al llamado de Jesús.
El, hoy espera que tú hagas lo mismo.
Oración
Señor, me cuesta ver la salida de la situación en la que me encuentro. Pero así como Bartimeo recibió un milagro de poder ver, hoy también quiero recibirlo. Que mi fe me haga ver tu mano llamándome. arrebato mi milagro, Te lo pido en el nombre de Jesús, amén.